El pilar europeo de derechos sociales fue aprobado conjuntamente por el Parlamento Europeo, el Consejo y la Comisión el 17 de noviembre de 2017, durante la Cumbre social en favor del empleo justo y el crecimiento celebrada en Gotemburgo, Suecia, y centra su atención en la conciliación.
En dicha cumbre se examinaron los ámbitos susceptibles de mejora: unos mercados de trabajo justos y eficaces, unos sistemas de protección social sostenibles y efectivos y la ampliación del diálogo social. La Cumbre reunió a Jefes de Estado y de Gobierno y representantes de las empresas y los sindicatos. En ella, el Parlamento Europeo, el Consejo y la Comisión Europea proclamaron el pilar europeo de derechos sociales.
El pilar europeo de derechos sociales consiste en dar a los ciudadanos unos derechos sociales nuevos y más efectivos. Se basa en veinte principios estructurados en tres categorías:
- Igualdad de oportunidades y de acceso al mercado de trabajo.
- Condiciones de trabajo justas.
- Protección e inclusión social.
Las medidas propuestas están destinadas, principalmente, a aumentar las posibilidades de que los hombres asuman más responsabilidades parentales y de cuidados. Ello beneficiará a los niños y ayudará a que aumente la participación de la mujer en el mercado laboral, reduciendo así la brecha de género (10,5 % en 2016 en España).
¿Por qué propone la Comisión una iniciativa sobre el equilibrio entre el trabajo y la vida?
Aunque cada vez más mujeres están altamente cualificadas y el 65 % de los graduados de hoy en Europa son mujeres, todavía hay 11,6 % menos mujeres en el empleo que hombres. En 2015, la tasa de empleo media de las mujeres con un hijo menor de 6 años era 8,8 % inferior a la de las mujeres sin hijos pequeños, y en varios Estados miembros esta diferencia supera el 30 %.
Una de las razones es que las oportunidades para que los hombres compartan las responsabilidades familiares en igualdad de condiciones con las mujeres siguen siendo limitadas. Las disposiciones sobre licencias son en su mayoría adoptadas por las mujeres, lo que alenta la desigualdad de género en el mercado laboral y en el hogar. La participación de las mujeres en el mercado laboral y, en consecuencia, su independencia económica, sigue siendo inferior a lo que debería ser.
¿Cuáles son los principales cambios provocados por la Directiva propuesta?